miércoles, 16 de enero de 2008

Vida


Luz, amanecer... Esperanza. Soné y me fortalecí de ese agua. Me sentí nacer. Sumergí toda la pena, toda la rabia, toda la tristeza... para llegar a volver a ser la que siempre fui. Para verme a mí. Para encontrarme al fin. ¡Me sentí vivir!. Recorrí un camino sin destino, sin luz, sin un rumbo que seguir. Me sentí morir... Encauce mi vida, atrapé al destino y me sentí resurgir. Ese baño de luz, esa agua bendita me hizo percibir que aún sigo siendo, que aún se vivir. Ya no miraré atrás, ya no volveré a perder. Mi destino se escribió en las estrellas; nací con él. Él guía mi paso, él no me volverá a dejar caer. Un cántico a la vida, un grito a existir. Me siento llena y plena. Me siento ser. Dueña para amar dueña para querer. Mi voluntad de ver, de volver a saber. Mis manos poderosas, mis manos deseosas de volver a ver... Roce mi sueño con los dedos y supe que lo quiero tener. Lo sujetaré con fuerza me atraparé a él. Una nueva vida traerá, un nuevo mundo... un nuevo amanecer. Ya no más tinieblas, ya no más dudas, ya no más ÉL. Ver crecer mis milagros, ver mi vida acontecer. Llena de dicha y gozo, ilusión, porvenir... Futuro, existir. Vida que me traes vida, vida que me haces vivir. Dar vida en mis entrañas... Dar vida en mi latir. Amores que están por llegar amores que han de venir. Amores y sueños espero tan solo por vivir.

No hay comentarios: